La idea principal de este estudio surgió de la necesidad de ofrecer nuevo ángulo de abordaje de textos que a priori los críticos solían ver o investigar desde una cierta perspectiva invariable. Una nueva lectura de una obra clásica desde un enfoque moderno podría llevarnos a revisar unas ideas arcaicas, que tal vez nos abre una nueva ventanilla para entender el texto de otra manera.
La Celestina, obra maestra universal, que pertenece a la época transitoria entre la Edad Media y el Renacimiento español, ganó gran fama por varias razones; desde la ambigüedad que rodea su producción, los datos indecisos sobre quién podría ser su verdadero autor, y la división no común de la obra, que dejó a varios críticos perplejos ante la idea de que cómo se puede clasificar la obra; género dramático o narrativa, el libro sigue ganando terreno en el campo de los estudios críticos.
Es una de las obras más estudiadas en la literatura. Los críticos casi no han dejado ninguna palabra sin someterla a una larga y minuciosa investigación. Sin embrago, me llamó mucho la atención que haya tanta unanimidad en odiar el carácter, dibujado con tanta perfección, de la Celestina, le ponen por encima toda la maldad del mundo.
Una relectura detenida de La Celestina siempre nos abre nuevos horizontes para entender este trabajo lleno de factores humanísticos. La obra está teñida del espíritu medieval cargado aún por los elementos misóginos. De ahí, podemos ver que otra perspectiva moderna de la obra nos deja entenderla desde otro enfoque. ¿Puede ser que La Celestina es la responsable de toda la maldad que llena la obra? ¿Será ella la culpable de la muerte de Calisto y Melibea y de los servidores también? ¿Podría existir otros elementos detrás de aquel desenlace dramático? El presente trabajo pretende encontrar respuestas para estas preguntas basándose en una nueva relectura moderna de la obra a la luz de las ideas feministas actuales, siguiendo por lograr este objetivo un método analítico